Son casi las dos y media de la tarde, estamos terminando de comer y suena el timbre de la puerta. Al abrir, un elegante joven trajeado y con buen porte nos espeta:
- «buenos días, ¿es usted Jesús?”
- “Sí, dígame”
- «Quiere pagar menos por su recibo de la luz?»
- Aquí empieza el dolor de cabeza para muchos, pero en diferido.
¡Cuidado!¡Un comercial de una compañía eléctrica se nos ha plantado en casa!. Amparándose en esta forma de venta, algunas empresas distribuidoras con pocos escrúpulos envían comerciales charlatanes que por ganar una mísera comisión no les importa engañar a todo aquel que se le cruce por delante, según hemos podido leer en el diario elpaís.
Cuidado con el número CUPS
El amable comercial, quiere que pagues menos por tu factura de la luz y te solicita educadamente que le entregues una copia de tu factura de la luz, para “comprobar” qué tarifa es la que se te está aplicando, con la excusa de ofrecerte una oferta de reducción del importe de la factura que estás pagando ahora. Y aquí viene el momento más delicado; cuando ofreces la factura de la luz, en ella se reflejan todos tus datos y el número CUPS*, que es como el DNI de la vivienda.
¿Y para qué quieren estos “comerciales” ver tu factura de la luz? ¿Para qué quiere saber esos datos? Pues o bien contratar servicios que no hemos solicitado, y que después para darlos de baja se convierte en una autentica pesadilla, o directamente cambiarte de compañía y darte la sorpresa cuando al mes o a los dos meses, te llega una factura de una empresa que no has contratado y te han hecho el cambio sin tu consentimiento.
La organización de consumidores Faqua recopiló solo en 2015 270 quejas relacionadas con esta estafa que, aunque no está extendida, puede pillar por sorpresa a personas más mayores que, con su buena fe, aceptan todas las sugerencias de un comercial entregado.
A quién tienes que dirigirte para cambiar de compañía o para realizar consultas
Si necesitas consultar, realizar modificaciones o cambiar de compañía, lo mejor es llamar por teléfono o personarse en las oficinas de la compañía. En los tiempos de crisis que corren, es muy fácil captar la atención de cualquier usuario, dado que estos solo ven subir el recibo de la luz en los últimos años.
Hay que destacar que este tipo de venta -el que se te presenten en casa- está prohibida, por ejemplo, en el Reino Unido. No nos debemos de dejar engañar y nunca, y bajo ningún concepto, le enseñaremos una factura a ningún «vendedor ambulante» que nos la solicite.
Así que, si queremos evitar sopresas, y no precisamente agradables en el recibo de la luz al mes siguiente de una visita de un comercial, lo mejor es prevenir y acudir a los establecimientos oficiales o al teléfono de la compañía.
Ahorrar sí, pero de verdad.
*CUPS: El código CUPS es como el D.N.I. de la instalación eléctrica. Este número puedes encontrarlo en las facturas de la luz, de esta forma puedes identificarte en la compañía eléctrica ante cualquier consulta, trámite o incidencia que haya podido surgir.
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